El nombre de nuestro personaje del mes está en muchos lugares públicos, por ejemplo en una avenida al oriente de la Cd. de México, así como en escuelas, Centros de Estudios del IPN, e inclusive el Centro de Control de Satélites Morelos lleva el nombre del Ingeniero Walter C. Buchanan, quien fuera egresado del Instituto Politécnico Nacional y ocupó cargos de primer nivel en el Gobierno Federal, se le considera el padre de la cohetería mexicana al diseñar y construir los primeros cohetes de combustible líquido que alcanzaron alturas de varias decenas de kilómetros. Se puede decir mucho de él; aquí presentamos solamente una semblanza.
Aparentemente los teléfonos celulares tipo Smartphone no conocen límites. Por sus características estos teléfonos atrajeron el interés de los ingenieros para aprovechar sus avances tecnológicos y buscar su inclusión en desarrollos espaciales lo cual se logró este año ya que fueron lanzados varios nanosatélites que emplean la funcionalidad de estos dispositivos como parte de la arquitectura del satélite, reduciendo con ello los costos de su desarrollo. Carlos Duarte nos proporciona detalles de las misiones que los incluyeron.
Se puede decir que el beso o picadura de la chinche de Chagas es equivalente a un beso mortal por las consecuencias de la invasión al organismo humano del parásito asociado a su picadura. La globalización ha exportado la enfermedad de Chagas de Latinoamérica a Norteamérica, Europa y Asia. La Dra. Marina Kastern nos dice como la tecnología espacial puede apoyar a combatir esta enfermedad que ya cuenta con varios millones de infectados en el mundo.
Juan José Díaz-Infante nos lleva de la filosofía Budista al espacio exterior en su artículo sobre el reto de hacer de un satélite una pieza de arte, y producir una “Ópera en el espacio”. Mezclar arte y ciencia, arte y tecnología, en donde el satélite es el pretexto para el ejercicio de la creatividad y la discusión, pero la experiencia es lo importante, algo así como un moderno Argonauta emprendiendo el viaje a la Itaca del espacio.
Aunque a veces no lo parece, nuestro México es un país multicultural y multilingüe. Este hecho es parte del folklor que se promueve para atraer al turismo, sin embargo tiene implicaciones profundas para los habitantes de poblaciones donde el español se habla solo por unos cuantos. El problema de la comunicación se agudiza en casos de requerir servicios de salud. Aquí es donde la tecnología de radiodifusión digital vía satélite y/o terrestre puede ayudar, como nos explica la Dra. Amanda Gómez en su artículo sobre el apagón analógico.
Editor
Mario M. Arreola Santander
Colaboradores
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Carlos Duarte
Arturo Serrano
Marina Kasten
Equipo de Divulgación
Miguel Angel Martagón
Flor Tanit Pérez Najar
Flor Tanit Pérez Najar